domingo, 16 de septiembre de 2012

Campos de minas

  Hay días que parecen campos de minas. Los recorre una con la precaución de las avanzadillas, tanteando bien el terreno peligroso y con escudo y vendas preparados. El jueves pasado fue uno de esos días y, aunque salía de casa con la primera herida ya asumida, a las dos de la tarde habían estallado ya dos artefactos. De uno llegó a alcanzarme la metralla. 


Marcial Gómez

4 comentarios:

José Antonio del Pozo dijo...

sí,Inma, a veces nos sorprende fuego amigo, otras veces adversario claramente. Pero que no nos alcancen nuestra más íntima alegría.
saludos blogueros

Inmaculada Moreno dijo...

Gracias, José Antonio. En eso estamos, en no dejarme afectar.
Saludos blogueros

Fernando dijo...

Espero que llevaras tu chaleco anti-balas.

Inmaculada Moreno dijo...

Estoy desarrollando mi coraza personal. Ya me queda poco para que sólo deje pasar los activadores de los buenos sentimientos y sea impermeable a los malos, pero aún no funciona bien del todo jejejeje.